LOS TRIGGERS EN LA BATERÍA: DEBATE DE LOS 90s

Cómo ya os dije en un anterior post, yo toco la batería. Hoy, vamos a tratar un tema sobre esto: Los triggers.

Para los que no lo sepan, los triggers son unas pequeñas piezas de metal que adherimos al aro de nuestro tambor. Producen un sonido adicional que puedes añadir a tu set. Es decir, que a la hora de editar de manera digital una grabación de batería, puedas cambiar su tonalidad. Su función es captar la vibración del parche y convertirlo en algo digital. Esto también puede hacerlo con los platillos. Ahora que sabemos de que sirven los triggers, podemos empezar con otra cuestión: ¿En que géneros musicales se usan y por qué?

Los triggers son usados prácticamente en cualquier subgénero extremo del Metal, ya sea Death Metal, Brutal-Death Metal, Melodic-Death Metal o Grindcore. Y se lo que pensaréis: ''El Melodic-Death Metal no es un subgénero muy extremo, ¿No?'' Y es verdad. Pero los triggers no se usan por qué sea un subgénero extremo, así sin más. Son utilizados por su doble bombo. Es decir, nosotros somos humanos. Y no podemos tocar ritmos exageradamente rápidos con nuestros pies a un volumen muy alto. Van a haber notas que se oigan más altas que otras. De esta manera, los triggers ''limpian'' nuestro sonido.

Durante finales de los años 80 y principios de los 90, salió esta controversia entre la comunidad baterística. Muchos afirmaban que era simplemente una nueva manera de mejorar el sonido, mientras otros creían que era una especie de ''trampa''. Como a baterías a favor, podemos destacar a Alex Van Halen, David Silveria, Vinnie Paul o Mario Duplantier. La lista podría seguir, ya que se puso esto de moda, por así decirlo. Como baterías en contra, podemos destacar a Dave Lombardo. El batería de ascendencia cubana, siempre ha afirmado que cree que los triggers son una trampa. Luego tenemos a otros como Joey Jordison, el cual dice que está bien usarlos en directo, para así poderle sacar un mejor sonido a tu kit. Eso sí, cree que en el estudio es una gran trampa.

Hay varias opiniones por el mundo, pero yo he llegado a mi propia conclusión:

Creo que los triggers son una herramienta muy útil, pero no las usamos de manera correcta. Opino como Joey Jordison, por así decirlo. Si no puedes tener una batería de extremadamente buena calidad, entiendo que se uses los triggers en directo. Pero, al menos para mí, la gracia cuando grabamos en un estudio está en encontrar tu sonido; en afinar la batería a tu gusto, comprar la marca de platillos que quieras y la cantidad que te apetezca... Todo eso se va con los triggers. Creo que es algo que se debería regular, y no debería ser usado tan a menudo por baterías profesionales. Por ejemplo, Vinnie Paul siempre ha usado triggers en el estudio, por lo que al oír pistas de Pantera encuentro un sonido extraño. Algo que siempre he odiado, ha sido el sonido del kit de Paul en temas como Cowboys From Hell o Walk.

Y tú, ¿que opinas de los triggers?